domingo, 13 de noviembre de 2011


CUATRO CAUSAS PRINCIPALES DE DIVORCIO

1) Problemas Financieros: (No tener un correcto entendimiento respecto del manejo del dinero, haciendo excesivas compras a crédito y consintiendo en gastos extravagantes).
2) Relaciones conflictivas con parientes: (Criticándolos y viviendo muy cerca de ellos).
3) Falta de énfasis en la vida espiritual: (Dejando de orar en la mesa, de tener cultos familiares y de concurrir a las reuniones de la Iglesia).
4) Fallas en la relación amorosa: (Carencias en las cortesías cotidianas, en la exteriorización del amor y en la adaptación sexual).


¿QUÉ HACER PARA EVITAR EL DIVORCIO Y TENER ÉXITO EN EL MATRIMONIO?


I. DEBEMOS INVITAR A JESÚS A NUESTRO MATRIMONIO 
Juan 2:2 Y fueron también invitados a las bodas Jesús y sus discípulos.

II. DEBEMOS HACER LO QUE JESÚS NOS DIGA 
Juan 2:5 Su madre dijo a los que servían: Haced todo lo que os dijere.

La orientación precisa de la Palabra, sus principios y enseñanzas valiosas, están establecidas para instruirnos sobre los diferentes aspectos de la vida familiar. Estos principios están al alcance de los que tienen un corazón humilde y dispuesto a obedecer lo que dice el Señor.
III. DEBEMOS VIVIR LLENOS DEL ESPÍRITU SANTO
Juan 2:9-10 Cuando el maestresala probó el agua hecha vino, sin saber él de dónde era, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al esposo, y le dijo: Todo hombre sirve primero el buen vino, y cuando ya han bebido mucho, entonces el inferior; mas tú has reservado el buen vino hasta ahora.

IV. DEBEMOS RECIBIR AYUDA DE OTROS CRISTIANOS 
Juan 2:5 Su madre dijo a los que servían: Haced todo lo que os dijere.
Volviendo al pasaje bíblico que estamos examinando, vemos que María la madre de Jesús estaba en las bodas. Ella representa a la iglesia, la comunidad cristiana que ayuda a que las parejas reciban ayuda. En la iglesia encontramos hermanos crecidos a quienes podemos recurrir en busca de sabiduría, consejo y orientación. Ellos serán nuestro ejemplo.

V. DEBEMOS APRENDER A PERDONAR
El principio del perdón, está implícito en el pasaje, ya que el segundo vino es figura de la sangre de Jesús vertida para el perdón de nuestros pecados.




sábado, 22 de octubre de 2011


Matrimonios Que Están Clamando a Dios Porque Desean Tener Hijos


Hoy dirijo estas palabras, impulsada por el Espíritu Santo, ya que llevo varios días inquietada y es para aquellos matrimonios que llevan tiempo esperando que se les conceda una petición muy especial. Que anhelan tanto tener hijos y que hasta el momento no han visto respuesta a lo que esperan. A esas parejas confundidas en ocasiones, se han estado preguntando ¿qué es lo que pasa? Y que como la mujer con el flujo de sangre han intentado y gastado todo, buscando solución a su problema y han terminado agotados y decepcionados.
Hoy, su única esperanza es a pesar de la multitud, sus problemas, debilidades y desesperación… Tocar el borde de Jesús para recibir su sanidad y milagro. Pero, hoy ustedes no se van a acercar a tocarlo, hoy no tienen que pasar por en medio de la multitud, porque Dios mismo viene a tocar sus vidas de una manera especial. Hoy su poder y virtud se manifestará en sus vidas porque él hará milagros y cosas grandes.
En el nombre de Jehová y bajo su poderosa mano, por la autoridad que me ha dado como su hija, yo declaro que vientres quedan sanos, que hombres con problemas de esterilidad podrán engendrar. Dios les visitará y les ungirá de tal modo que en poco tiempo recibirán la noticia de que viene en camino el hijo o hija que han estado ansiando.
Algunas parejas serán puestas a prueba, el enemigo intentará robar su fe, para que piensen que la promesa que por tanto tiempo Dios les ha estado declarando, no llegará. ¡Pero es mentira del príncipe de las tinieblas! Porque aunque la visión tardará aún por un tiempo, se aproxima, no mentirá, recibirán su respuesta también.
Ana oró y Dios contestó su petición. Aún siendo mayores, Zacarías y Elizabeth recibieron respuesta y llegó Juan el Bautista a llenar de amor sus vidas. Abraham y Sara tuvieron a Isaac y sus rostros se iluminaron de sonrisas. Manoa y su esposa recibieron a Sansón que marcó las páginas de la historia. Y todos estos matrimonios tienen algo que les asemeja; sus hijos fueron utilizados grandemente para el servicio de Dios.
Oro y pido a Dios que a partir de este mensaje que me ha dado, vientres comiencen a crecer y testimonios comiencen a llegar para la gloria de Dios y el aumento de la fe de muchos.
Dios mismo hace sentir a mi corazón que inclusive, matrimonios que han estado confrontando problemas por esta razón, serán restaurados porque el amor nunca deja de ser.

¡Adelante y Dios les Bendiga!



Crédito: Brendaliz Avilés ( http://destellodesugloria.org/blog/)

martes, 27 de septiembre de 2011

MATRIMONIOS, A Prueba De Fuego


Intentemos un día a la vez... 
Los 40 puntos del Desafío del Amor
DÍA 1
Aunque el amor se comunica de distintas maneras, nuestras palabras a menudo reflejan la condición de nuestro corazón. Durante el próximo día, decide demostrar paciencia y no decirle nada negativo a tu cónyuge. Si surge la tentación, elige no decir nada. Es mejor contenerte que expresar algo que luego lamentarás.
DIA 2
Hoy, también, además de no decirle nada negativo a tu cónyuge, realiza al menos un gesto inesperado como acto de amabilidad.
DIA 3
Es difícil que te importe algo en lo que no inviertes tiempo, energía y dinero. Además de refrenarte de los comentarios negativos, cómprale algo a tu cónyuge que le comunique: “Hoy estuve pensando en ti".

DIA 4
Ponte en contacto con tu cónyuge en algún momento del día. Pregúntale cómo está y si puedes hacer algo por él.
DIA 5
Pídele a tu cónyuge que te diga tres actitudes que le incomodan o le irritan de ti. Debes hacerlo sin atacar ni justificar tu conducta. Su perspectiva es la importante en este caso.
DIA 6
Frente a las circunstancias difíciles de tu matrimonio decide reaccionar con amor en lugar de irritación. Haz una lista – por prioridades- de las cosas que necesitas añadir en tu agenda.

DIA 7
Busca dos hojas de papel. En la primera escribe cualidades positivas de tu cónyuge, en la segunda, los aspectos negativos. En algún momento del día elige un atributo positivo de esa lista y dale gracias a tu cónyuge por esa característica.
Coloca las dos hojas en un lugar secreto para otro día. Hay un propósito y un plan distinto para cada una.
DIA 8
Como el amor no es egoísta y coloca a los demás en primer lugar, te lleva a celebrar los éxitos de tu cónyuge en lugar de sentirte contrariado por ellos. Dile a tu cónyuge cuánto te alegra algo que haya logrado hacer recientemente.
Toma la lista de atributos negativos que hiciste ayer y quémala con discreción.
DIA 9
Piensa una manera especial de saludar hoy a tu cónyuge para reflejar tu amor por él. Hazlo con una sonrisa y con entusiasmo.
DIA 10
Haz algo fuera de lo común por tu cónyuge: Lava su automóvil. Limpia la cocina. Compra su postre favorito. Dobla la ropa lavada. Demuéstrale amor por la pura satisfacción de ser su compañero en el matrimonio.
DIA 11
¿Qué necesidad de tu cónyuge podrías satisfacer hoy? Elige un gesto que diga: “Te valoro” y hazlo con una sonrisa.
DIA 12
Demuestra amor al decidir de buen modo ceder en un área de desacuerdo entre tú y tu cónyuge.
DIA 13
Habla con tu cónyuge en cuanto a establecer unas reglas de juego saludables durante las discusiones.
DIA 14
El desafío de hoy puede llevarte a un cambio verdadero y radical en tu manera de pensar. Con determinación deja de lado una actividad que hagas en general para poder pasar tiempo de calidad con tu cónyuge.
DIA 15
Elige una manera de mostrarle respeto a tu cónyuge que sea diferente de lo habitual. Quizá sea abrirle la puerta a tu esposa, o guardarle la ropa a tu esposo, o sea la forma en que escuches y hables cuando se comuniquen. Muéstrale a tu cónyuge que lo tienes en alta estima.
DIA 16
Comienza a rezar por el corazón de tu cónyuge y tu matrimonio.
DIA 17
Hoy mismo puedes comprometerte a reestablecer la comunicación perdida. Habla con tu cónyuge, escúchalo de verdad cuando te cuente pensamientos y luchas personales, haz que se sienta seguro.
DIA 18
Desea conocer a tu cónyuge más y mejor de lo que la conoces, transfórmala en tu campo de estudio elegido. Te sorprenderás de su belleza. Prepara una cena especial en tu casa. Hablar, conoceros. Decide que sea una noche agradable para los dos.
DIA 19
Vuelve a mirar los desafíos de los días anteriores, ¿hubo algunos que te parecieron imposibles o que los hiciste con desgana? ¿Has tomado la conciencia de la necesidad que Dios cambie tu corazón y te de la capacidad de amar? ¿Qué tal si le pides a Dios que te muestre como está tu relación con Él y la fortaleza y la gracia para resolver tu destino eterno?
DIA 20
Atrévete a confiar en Jesucristo. Atrévete a orar: “Señor Jesús, Soy pecador; pero has demostrado tu amor por mí al morir para perdonar mis pecados, y has aprobado tu poder para salvarme de la muerte mediante tu resurrección. Cambia mi corazón y Sálvame con tu gracia”
DIA 21
Busca para orar y leer las Sagradas Escrituras. Sumérgete en el amor y las promesas que Dios tiene para ti.
DIA 22
El amor es una decisión, no un sentimiento. Es una acción que se pone en marcha, no un acto reflejo. Hoy mismo, elige comprometerte con el amor aun si a tu cónyuge ya casi no le interesa recibirlo. Dile hoy con palabras parecidas a estas “Te quiero. Elijo amarte aún si no me retribuyes”
DIA 23
Quita todos los parásitos que te robe sentimientos y aleje tu corazón de tu cónyuge: cualquier adicción o influencia que se adhiere en tu corazón y le chupa la sangre a tu matrimonio: drogas, alcohol, juego, pornografía,…Consume tus pensamientos, te roba tu lealtad a aquellos a los que amas.
También la rutina y el aburrimiento.
DIA 24
Ponle fin ahora. Identifica todo objeto de lujuria en tu vida y quítalo. Distingue cada mentira que has tragado al buscar el placer prohibido y recházala. No se puede permitir que la lujuria viva en una habitación trasera. Hay que matarla y destruirla (hoy mismo) y reemplazarla con las promesas de Dios y con un corazón lleno de su amor perfecto.
DIA 25
Hoy mismo, perdona cualquier cosa que no le has perdonado a tu cónyuge. La falta d perdón os ha mantenido encarcelados en la soberbia durante mucho tiempo. Desde lo más profundo de tu corazón y con sinceridad, di: “Elijo Perdonar".
DIA 26
Pídele perdón a Dios por las cosas que has hecho mal y luego humíllate lo suficiente como para confesárselas a tu cónyuge. Hazlo con sinceridad. Aún si responde con crítica, acéptala y recíbela como un consejo.
DIA 27
Elimina de tu hogar el veneno de las expectativas poco realistas, y dile a tu cónyuge que lamentas haberle exigido tanto. Prométele que intentarás comprenderlo y reafirmar tu amor incondicional.
DIA 28
¿Cuál es la mayor necesidad en la vida de tu cónyuge en este momento? ¿Puedes ayudarle aún a costa de un sacrificio heroico? No importa si la necesidad es grande o pequeña, proponte hacer lo que puedas por satisfacerla.
DIA 29
Antes de volver a ver a tu cónyuge hoy, reza por él mencionando su nombre y sus necesidades. Sin importar si te resulta fácil o no, di “te amo” y luego expresa amor por tu pareja de alguna manera tangible. Vuelve a rezar y agradécele a Dios el privilegio de amar a esta persona especial… de forma incondicional, como él nos ama.
DIA 30
Pídele al Señor que te revele cualquier actitud de tu corazón que esté amenazando la unidad con tu cónyuge y para que haga lo mismo con él. Habla con franqueza con tu cónyuge sobre esta cuestión, buscando a Dios para hallar la unidad.
DIA 31
¿Todavía hay alguna área en la que no hayas sido lo suficientemente valiente para afrontarla? Confiésala a tu cónyuge hoy mismo y decide solucionarla. La unidad de tu matrimonio depende de eso. Luego comprométete con tu cónyuge y con Dios a transformar tu matrimonio en la prioridad sobre toda otra relación humana.
DIA 32
Si es posible, intenta hoy iniciar la relación sexual con tu cónyuge. Hazlo de una manera que honre lo que tu cónyuge te haya dicho (o te haya dado a entender) con respecto a lo que necesita de ti en el área sexual. Pídele a Dios que los dos puedan disfrutarlo y que se transforme en un camino hacia una mayor intimidad.
DIA 33
Reconoce que tu cónyuge es esencial para tu éxito. Hoy mismo déjale saber que deseas incluirlo en tus próximas decisiones, y que necesitas su opinión y su consejo. Si en el pasado has ignorado sus aportaciones, admite tu descuido y pídele que te perdone.
DIA 34
Busca un ejemplo específico y reciente de cuando tu cónyuge haya demostrado el carácter cristiano de una manera evidente. En algún momento del día elógialo por esto.
DIA 35
Busca un buen consejero para tu matrimonio.Si te parece que es necesaria la terapia, da el primer paso y concierta una cita. Durante este proceso pídele a Dios que te de discernimiento y dirija tus decisiones.
DIA 36
Toma el compromiso de leer la Sagrada Escritura todos los días. Consigue un libro de meditaciones o algún otro recurso que te sirva como orientación. Comienza a construir tu vida sobre roca.
DIA 37
Pregúntale a tu cónyuge si pueden comenzar a orar juntos. Usen este tiempo para confiarle al Señor las inquietudes, los desacuerdos y las necesidades. No olviden darle gracias por su provisión y sus bendiciones. Aun si tu cónyuge se niega a hacerlo, decide pasar este momento diario en oración a solas.
DIA 38
Piensa qué le gustaría a tu cónyuge, si fuera posible. Ponlo en oración y comienza a trazar un plan para cumplir algunos de sus deseos (sino todos) hasta donde puedas.
DIA 39
Escríbele una carta de compromiso a tu cónyuge. Incluye la razón por la cual te comprometes con este matrimonio hasta la muerte, y exprésale que te has propuesto amarlo sin importar lo que suceda. Deja la carta en un lugar donde tu pareja la pueda encontrarla.
DIA 40
Escribe una renovación de tus votos y colócala en tu hogar. Quizá, si corresponde, podrías planear una renovación formal de tus votos matrimoniales ante un pastor, con la familia presente. Que sea una afirmación viva del amor del matrimonio a los ojos de Dios y del alto honor de ser como la sal y la pimienta: dos personas diferentes que hacen su vida juntas.

jueves, 26 de mayo de 2011

Fortalecidos en la Tormenta - Cordón de tres no se rompe tan facil

No hay mejor lugar en la tierra que los brazos de Dios. Aun cuando te miras caminando por las sombras del valle de la muerte, no hay manera de tener temor, solo porque sabes que Dios esta contigo. La pareja pasa por varias etapas y procesos en su vida que le ayudan a crecer y fortalecer la relación. Deben trabajar en equipo para salir adelante.

Podrán encontrar momentos de alegría y gozo, estos son muy ligeros de llevar, pero también tristezas y desilusiones en ellas se debe permanecer juntos apoyándose uno al otro fortaleciéndose con amor y comprensión. Dios los consolidará a ambos siempre que confiemos en su infinito amor y misericordia.

“Mientras estaba en el hospital por presentar un aborto espontaneo, con mucho dolor físico y emocional, oraba al Señor por fortaleza y sé que Él me la daba, pero una de las cosas que me mantenía confortada; era el saber que mi amado esposo estaba a las puertas del mismo esperando por mí. Fue una semana de muchas angustias no nos permitían comunicarnos, el no podía entrar a verme y yo no podía salir, pero muy a pesar de las circunstancias siempre encontrábamos la manera de saber el uno del otro, Dios respaldo nuestro amor porque somos una sola carne, varias personas al ver nuestra necesidad de estar unidos, sirvieron de canales para lograr comunicarnos, nuestros mensajes llegaban gracias a que las personas prestando sus propios teléfonos para que pudiésemos enviarnos mensajes de textos e incluso llamadas. En ocasiones simplemente llevaban mensajes orales de un lugar a otro dando el aliento que necesitábamos. EBENEZER hasta aquí nos ayudo Dios”

Fueron momentos difíciles que no sabíamos manejar por la angustia, solo Dios con su amor y misericordia nos fortaleció para soportar esta tormenta. Permitiéndonos estar separados e incomunicados, Dios sabe que separados era muy difícil de llevar la carga, pero juntos podemos lograr superar cualquier situación de aflicción.
En las tormentas la relación se fortalece, pero solo el Gran Yo Soy que es Cristo Jesús puede respaldarnos… Cualquiera que sea la prueba que esten pasando, no olviden que es mejor pasarla juntos

¡Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre lleno de misericordia y Dios de todo consuelo! Él nos da siempre el aliento que necesitamos para superar toda tribulación y para que, de la misma manera que él nos anima y consuela, TAMBIEN NOSOTROS SEAMOS CAPACES DE CONSOLAR A OTROS que se encuentren atribulados. Porque mientras más sufrimos por causa de Cristo, más es el consuelo y el aliento que de Cristo recibimos. Pero tened en cuenta que, si hemos de afrontar duras pruebas, es porque tratamos de llevaros consuelo y salvación, y que si Dios nos ...anima en medio de nuestras tribulaciones, también es para que os llevemos consuelo y salvación, aunque todo ello lo hayáis de recibir padeciendo las mismas pruebas que nosotros padecemos. ‎2Cor. 1:3-6

miércoles, 11 de mayo de 2011

Mi Vida Sin Ti


Canción de Jesús Adrian Romero, dedicada a su esposa "MI VIDA SIN TI" aqui les dejo la letra, no dejen de escucharla


No me puedo imaginar mi vida, sin ti
no me puedo imaginar, mis horas;
sin tu silueta en mi memoria
te has vuelto parte de mi historia.

No me puedo imaginar los años, que vendran
no lo puedo imaginar, si tu no estas
sin tu mirada y tu sonrisa, mi vida no seria la misma.

contigo me siento que puedo llegar, tan alto y
tan lejos como superman...

coro:
Contigo yo me siento como heroe
tu amor es mi energia mi motor
y mi mayor hazaña es conquistarte
y darte a ti mi amor por siempre
y proteger tu corazon//

¿Por qué somos tan diferentes?

Todos somos diferentes. ¿Cómo aceptar las diferencias de mi pareja?
Muchas veces hemos escuchado el dicho "Los Polos Opuestos se Atraen" esto no está tan lejos de la realidad, veamos:
Cuando Dios creó la primera pareja, podemos observar claramente que los hizo diferentes el uno del otro. Hombre y mujer "Entonces Dios el Eterno hizo caer un profundo sueño sobre Adán, y mientras dormía tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que Dios el Eterno tomó del hombre, formó una mujer, y la trajo al hombre". (Génesis 2:21-22)

¿Cuál era el propósito de Dios al hacerlos diferentes?
Dios hizo a la mujer diferente al hombre, no solo físicamente, sino también emocionalmente. Y lo hizo así con toda intención; para que la mujer fuera complemento perfecto del varón. Una definición sencilla de esto es que la mujer es todo lo que el hombre no es. Lo que le falta al hombre, le sobra a la mujer, y lo opuesto también es cierto. Lo que le falta a la mujer, le sobra al hombre. Al sumar las características diferentes de ambos, es como Dios planeaba hacerlos: UNO COMPLETO.

Sin embargo, es triste ver que cuando estas diferencias empiezan a ser notorias en el matrimonio lejos de unir a la pareja, la separan. ¿Ya notaron que en muchas parejas lo que en el noviazgo los atraía, en el matrimonio los perturba, lo que los aproximaba suele separarlos, y que cada vez hay menos cosas en común? ¿Qué es lo que ocurre?
El problema es que los seres humanos no comprendemos nuestras diferencias o no le damos el valor que estas tienen, en vez de ver que nuestras diferencias pueden fortalecer nuestra unidad, pensamos que el al no ser iguales no podemos ser compatibles.
Nos cuesta entender que juntos podemos ser más fuertes que solos, y es común escuchar reproches como: "Tú no eres como yo soy", o "Eres exactamente como tu madre", o "No somos compatibles". Si usted está casado, no permita que las diferencias que existen entre usted y su pareja destruyan su relación.
Recuerde que la personalidad del hombre y la mujer difieren mucho, que ambos intentan encarar la vida con impulsos, sensaciones y emociones totalmente opuestas. Y que el secreto del éxito de una pareja, no está en rechazar esas diferencias, sino más bien en complementarlas.
Muchos hombres, por ejemplo, disfrutan comunicando ideas y planes, mientras que por su parte las damas gustan de hablar sobre sensaciones y emociones. El hombre es más inclinado a expresar su amor haciendo cosas, mientras que las mujeres lo expresan a través de palabras.
Las mujeres tienden a observar los detalles: ellas son capaces de recordar las particularidades, la ropa con que andaban vestidos, colores, etc.  Los hombres resaltan los acontecimientos en términos generales, suelen quedar impacientes, cuando se presentan muchos detalles. Instintivamente, un hombre racional se casa con una mujer sentimental.
Los extrovertidos, que gustan de estar en compañía de otras personas, se casan con introvertidos que están en busca de tranquilidad.
¿Por qué el hombre es diferente de la mujer? Porque cada uno necesita del otro para estar completo, para fortalecer sus debilidades, para compartir la fuerza que cada uno trajo a esta nueva relación.
Cuando una persona siente que la otra está intentando cambiarla, generalmente la reacción es negativa, la persona se siente defraudada. Solamente cuando la persona es aceptada y amada es capaz de cambiar.
Hay ocasiones en que los constantes reclamos y quejas pueden ocasionar cambios en la conducta de una persona, pero rara vez esos cambios son el resultado de una transformación interior y casi siempre terminan por empeorar la relación. Cualquier cambio forzado acaba generando resentimiento, hostilidad, rechazo y poco a poco irá minando el amor.
Si usted desea ser feliz en su matrimonio y no quiere que fracase, entonces desista de su interés por cambiar a su pareja. Esto nunca funciona. Cuando uno intenta cambiar al otro en vez de aceptarlo como es, las cosas tienden a empeorar en vez de mejorar.

PARA REFLEXIONAR.
Una pareja de cónyuges debe cultivar el respeto y el afecto mutuo. Deben velar acerca de su espíritu, sus palabras y sus actos, a fin de no decir ni hacer nada que cause irritación o molestia. Cada uno debe preocuparse por el otro, y hacer todo lo que esté a su alcance para hacerlo feliz.
(Créditos:MUNDO PORTAL)

jueves, 5 de mayo de 2011

Matrimonios Jovenes

Los matrimonios jóvenes
Una de las características de los jóvenes es que son muy violentos, hacemos las cosas sin pensar en las consecuencias, cuando llegamos al matrimonio y nos enfrentamos a una realidad distinta de lo que habíamos imaginado, producto del “amor”; ahora tenemos que trabajar, pagar cuentas, dejar a un lado los proyectos personales, no más diversión con los amigos, etc.
Siendo también jóvenes se nos arruga el corazón cuando observamos como las parejas jóvenes son tan débiles, cualquier tormenta los puede derribar, algunos de ellos incluso fracasando antes del primer año de convivencia, y solo puedo pensar en ¿qué podemos hacer?, ¿dónde está la falla?, ¿de quién es la culpa?, ¿podemos prevenirlo?
¿Por qué fracasan los matrimonios jóvenes?
A lo largo de un año de investigación puede aislar las que considero las causas más importantes que llevan al fracaso a los matrimonios jóvenes. Pasemos a verlas:
Hijos sobreprotegidos
En las familias urbanas, los peligros que entraña la ciudad y la escasez de hijos vuelven a los padres sobre protectores. Se les evita sufrimientos y se les llena de cosas, al punto que no saben valorar lo que no les ha costado. Los padres hacen incluso las cosas que les corresponde hacer a sus hijos, volviéndolos inútiles. Son hijos a los que se les ha evitado el sufrimiento al punto de volverlos ineptos para un mundo altamente competitivo.
Intolerantes a los conflictos
La sobreprotección ha terminado por volverlos intolerantes para afrontar los conflictos que la vida de pareja les depara. Acostumbrados a tener siempre lo que quieren, exigen de su pareja se comporte como lo han hecho sus padres, cediendo en todo y satisfaciendo todos sus caprichos y necesidades. Cuando adviene el conflicto, no son capaces de ceder ni de afrontar la situación, entonces la mejor salida al conflicto se vuelve el evitarlo y darle la espalda. ¿Ha donde escapar?, pues al único lugar donde nos comprenden: "debajo de las polleras de la mamita".
Cortarles la vía de Escape
El 70 % de los matrimonios que fracasan por una "tercera persona", esta tercera persona no era necesariamente un amante sino que en la gran mayoría de los caso se trataba de un familiar cercano, en especial la madre de uno de los cónyuges, o sea la suegra.
Muchos de los hijos que "partían" para formar un nuevo hogar, aún mantenía en sus casas de origen, el dormitorio de soltero que la madre le tenía siempre listo para cuando quisiera "llegar a descansar". ¿Descansar de qué o de quién? - me pregunto - y la única respuesta que encuentro es que del "pobre cónyuge" con quien su hijo se casó. Si la vía de escape está cerrada, les tocará enfrentar con sus cónyuges los problemas.
El casado casa quiere
Ya el Génesis 2.24, "Dejará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne".
Si los matrimonios jóvenes le hicieran caso a este texto bíblico, no habría tantos fracasos. Este pasaje tiene más de tres mil años de antigüedad y resume la esencia del matrimonio. De ahí que la primera recomendación que siempre les hago a los futuros esposos es el de salir de la casa paterna e ir a formar su propio hogar bajo su propio techo, aunque sea arrendado, ya que cómo dice el viejo dicho: "El casado, casa quiere".
Aconsejo a los futuros esposos que deben buscar primero dónde van a vivir, porque lo ideal es que empiecen los dos juntos y solos, para que puedan construir su nido de amor y formar una relación fuerte de interdependencia, excluyendo a terceros.
Se unirá a su mujer
Mi segunda recomendación, también inspirada en Gn 2,24 es: "Se unirá a su mujer." .El hombre debe aceptar a su cónyuge con sus cualidades y defectos. Si le descubre aspectos negativos, acéptelo como es y no trate de cambiarlo, ni menos se le ocurra pensar que su pareja cambiará con el matrimonio, pues el matrimonio nunca mejora las cosas, sino más bien, tiende a complicarlas.
Cómo acabar con las discusiones
Me entristece escuchar en novios ya comprometidos en matrimonio, frases como: "Me voy a casar, pero si me va mal me separo". Si de entrada, antes de haber iniciado la experiencia van ya con esa premisa negativa, entonces aquel matrimonio jamás va a tener éxito.
A los padres de hoy les recomiendo educar a sus hijos en el compartir, a no satisfacer todas sus necesidades, ya que así podemos estar creando hijos excesivamente individualistas e incapaces para el amor.
El respeto mutuo es el eje central que siempre debe cuidarse en un matrimonio, pues si hay respeto y consideración por el otro, ese matrimonio tendrá la garantía y certeza de llegar a envejecer juntos.
Fuente: P. Carlos E. García Llerena CJM

Por otra parte, las parejas jóvenes deben dejarse ayudar por personas idóneas y con mayor experiencia, un consejero o un pastor. Actualmente la sociedad nos vende, el divorcio como si fuera un rico mangar. Pero veamos lo que dice la palabra de Dios. “Casi en todo mal he estado, En medio de la sociedad y de la congregación. Bebe el agua de tu misma cisterna, Y los raudales de tu propio pozo. ¿Se derramarán tus fuentes por las calles, Y tus corrientes de aguas por las plazas? Sean para ti solo, Y no para los extraños contigo. Sea bendito tu manantial, Y alégrate con la mujer de tu juventud, Como cierva amada y graciosa gacela. Sus caricias te satisfagan en todo tiempo, Y en su amor recréate siempre. ¿Y por qué, hijo mío, andarás ciego con la mujer ajena, Y abrazarás el seno de la extraña? Porque los caminos del hombre están ante los ojos de Jehová, Y él considera todas sus veredas”. Proverbios 5:14-21

Debemos alegrarnos con nuestra pareja, que seamos jovenes no significa que tendremos que olvidarnos de las cosas que nos gustan,  Que DIOS nos de la Sabiduria para llegar a VIEJITOS con nuestro conyuge.